Giovanni
Battista Draghi (1710/1736), apodado Pergolesi, fue uno de los más
relevantes compositores de la "ópera bufa" italiana. Joven enfermizo,
compositor brillante y genio verdaderamente precoz: inmediatamente después de
su muerte por tuberculosis, ocurrida en Pozzuoli, cerca de Nápoles, en 1736 a
la edad de 26 años, su obra llegó a calar en toda Europa. Incluso Bach usó el “Stabat Mater” como base de su Salmo "Tilge,
Höchster, meine Sünden", BWV 1083.
Su ópera “Il prigioner
superbo" incluye un segundo acto cómico: Intermezzo, la Serva Padrona (La
Campesina o La criada patrona) (1733). Cuando, en 1752, se presentó en París,
la figura de Pergolesi ya era toda una referencia.
Algunas de sus óperas
son: La conversión y muerte de San Guillermo (1731), El hermano enamorado
(1732), Adriano en Siria (1734), L'Olimpiade (1735), Il Flaminio (1735) y
Achille in Sciro, todas ellas muy interesantes, aunque su obra más conocida es,
sin duda, su Stabat Mater.
Aparte de su Misa en Fa, su gran trabajo de música
sacra más conocido es, sin duda, su Stabat Mater, para soprano, contralto y
orquesta. Según el primer biógrafo de Pergolesi, un Monasterio de Nápoles
encargó en 1725 al gran compositor Alessandro
Scarlatti poner música al texto del Stabat
Mater, pero diez años después la Cofradía de "San Luigi di
Palazzo" de Nápoles solicitó a Pergolesi la composición de una nueva obra
para dos voces altas (soprano castrati o masculinas). La obra le fue
comisionada por la Cofradía con objeto de reemplazar al Stabat Mater de Scarlatti,
que previamente, se cantaba todos los Viernes Santos. Incluso el propio Bellini la calificó de "divino poema di dolore".
Stabat Mater (en latín
Estaba la Madre) es una secuencia católica del siglo XIII atribuida a Inocencio
III y al franciscano Jacopone da Todi. Esta plegaria que comienza con las
palabras Stabat Mater dolorosa (estaba la Madre sufriendo) medita sobre el
sufrimiento de María, la madre de Jesús, durante la crucifixión.
Pergolesi aceptó el
encargo a pesar de hallarse ya muy enfermo, al parecer de tuberculosis, y la
leyenda dice que compuso el Stabat Mater en su lecho de muerte.
El misticismo que
transmite esta obra póstuma la convirtió rápidamente en una pieza religiosa de
éxito internacional, con muchas similitudes con el Réquiem de Mozart, la otra
gran obra de música sacra escrita en el ocaso de un gran compositor.
En 1736, a los 26 años,
Pergolesi murió de tuberculosis, y sus escasas posesiones fueron vendidas para
pagar sus exequias. Fue enterrado en una fosa común de Pozzuoli (cerca de Nápoles).
Mark de Zabaleta